En la sociedad actual como en las sociedades pasadas se ha tenido la creencia que el dinero es símbolo de maldición, poder y por ende el origen de toda la maldad porque mientras más dinero tenga una persona indica que existirá mayor ambición y por ende mayor inclinación a hacer lo que sea con tal de obtener dinero sin importar los medios. Porque a fin de cuentas el fin justifica los medios. Pero, ¿Qué tan cierto es esto? ¿Es tan solo un estereotipo implantado por nuestros ancestros la cultura universal? La respuesta de estas preguntas las plantea Francisco D´Anconia, personaje de La Rebelión de Atlas, quien da un discurso sobre el dinero y como este tiene una repercusión positiva en la sociedad, siendo el hombre la causa de todos los males.
A lo largo del discurso Francisco plantea ciertos puntos de gran importancia como: "El dinero lo hacen posible sólo los hombres que producen, ¿Es eso lo que consideráis malvado?"(página 357) Francisco plantea que el dinero no es en sí malvado, sino que el hombre que le produce se convierte en malvado debido a ese mal uso del dinero. Por lo que el estereotipo que el dinero es una maldición para la vida del hombre es en sí una mentira. Es aquí donde entra el concepto de raciocinio que según la Real Academia Española es el argumento o discurso o más bien la capacidad de raciocinar. Gracias al concepto de raciocinio se puede analizar como es el hombre quien se corrompe a sí mismo a través del dinero, provocando una maldición (presentándolo en término coloquial). Por esto cabe mencionar un ejemplo de suma importancia, la herencia. El heredero es quien recibe todas las ganancias trabajo del esfuerzo de la persona que muere o da la herencia, y por ende el heredero no valora ese dinero porque no le ha costado, por lo que lo despilfarra sin tener en cuenta las consecuencias de no administrar bien el dinero. Es aquí donde se comienza con la idea que el dinero hace malo al hombre cuando en realidad fue la persona que recibió la herencia quien por la ambición y poder no supo administrar de manera adecuada el dinero, perdiéndolo todo. Así que, ¿Es realmente el dinero una maldición para el hombre?
En realidad no, porque el hombre es quien se corrompe a sí mismo en busca de obtener más dinero y por ende más poder; siendo esto una situación que ha venido proyectándose de generación tras generación, la sed de poder ha creado un monstruo de falta de raciocinio y moral para tomar las decisiones correctas sin afectar a terceros. Porque como menciona el personaje, las personas que producen son las que obtienen ese dinero por ende que maldad existe en esto. Cada persona decide los medios de su obtención, dando como resultado caminos por los que los medios de obtención son fidedignos o corruptos. Francisco plantea algo muy importante sobre el concepto de dinero y su creación: "El dinero se crea antes de que pueda ser robado o mendigado; es creado por el esfuerzo de cada hombre honrado, de cada uno hasta el límite de su capacidad. Un hombre honrado es el que sabe que no puede consumir más de lo que produce." (página 358) Francisco plantea una idea clara y concisa y es que el dinero es producto del trabajo del hombre honrado y trabajador más no producto de hombres llenos de maldad y ambición de poder. El dinero puede proceder de fuentes corruptas, como es el ejemplo en países como Guatemala, pero esto no significa que la maldad esté en el mismo. Cada hombre es responsable de sus propias acciones, siendo esta responsabilidad y criterio de cada persona, que conlleva principios, valores y ética moral, lo que la lleva a producir de manera honesta o corrupta.
En conclusión, se menciona en el libro: "Te dará los medios para la satisfacción de tus deseos, pero no te proveerá con deseos." (página 359) Esta frase concluye mi pensamiento acerca que Francisco plasmó claramente que el dinero no es producto de la maldad del hombre y mucho menos le vuelve un ser malvado. Más bien es la herramienta para el desarrollo y realización del hombre, dentro de los límites de un raciocinio adecuado y certero. Porque el hombre que triunfa al final es el hombre justo y con un mejor raciocinio de las distintas situaciones que se le presentan. Además el dinero no proveerá la satisfacción plena de un hombre, porque el dinero no es el fin último del ser humano. El dinero no compra la felicidad y mucho menos la dignidad y fin último del ser. El dinero es únicamente un bien material que permite al hombre superarse pero no de manera ética ni moral.
Bibliografía:
A lo largo del discurso Francisco plantea ciertos puntos de gran importancia como: "El dinero lo hacen posible sólo los hombres que producen, ¿Es eso lo que consideráis malvado?"(página 357) Francisco plantea que el dinero no es en sí malvado, sino que el hombre que le produce se convierte en malvado debido a ese mal uso del dinero. Por lo que el estereotipo que el dinero es una maldición para la vida del hombre es en sí una mentira. Es aquí donde entra el concepto de raciocinio que según la Real Academia Española es el argumento o discurso o más bien la capacidad de raciocinar. Gracias al concepto de raciocinio se puede analizar como es el hombre quien se corrompe a sí mismo a través del dinero, provocando una maldición (presentándolo en término coloquial). Por esto cabe mencionar un ejemplo de suma importancia, la herencia. El heredero es quien recibe todas las ganancias trabajo del esfuerzo de la persona que muere o da la herencia, y por ende el heredero no valora ese dinero porque no le ha costado, por lo que lo despilfarra sin tener en cuenta las consecuencias de no administrar bien el dinero. Es aquí donde se comienza con la idea que el dinero hace malo al hombre cuando en realidad fue la persona que recibió la herencia quien por la ambición y poder no supo administrar de manera adecuada el dinero, perdiéndolo todo. Así que, ¿Es realmente el dinero una maldición para el hombre?
En realidad no, porque el hombre es quien se corrompe a sí mismo en busca de obtener más dinero y por ende más poder; siendo esto una situación que ha venido proyectándose de generación tras generación, la sed de poder ha creado un monstruo de falta de raciocinio y moral para tomar las decisiones correctas sin afectar a terceros. Porque como menciona el personaje, las personas que producen son las que obtienen ese dinero por ende que maldad existe en esto. Cada persona decide los medios de su obtención, dando como resultado caminos por los que los medios de obtención son fidedignos o corruptos. Francisco plantea algo muy importante sobre el concepto de dinero y su creación: "El dinero se crea antes de que pueda ser robado o mendigado; es creado por el esfuerzo de cada hombre honrado, de cada uno hasta el límite de su capacidad. Un hombre honrado es el que sabe que no puede consumir más de lo que produce." (página 358) Francisco plantea una idea clara y concisa y es que el dinero es producto del trabajo del hombre honrado y trabajador más no producto de hombres llenos de maldad y ambición de poder. El dinero puede proceder de fuentes corruptas, como es el ejemplo en países como Guatemala, pero esto no significa que la maldad esté en el mismo. Cada hombre es responsable de sus propias acciones, siendo esta responsabilidad y criterio de cada persona, que conlleva principios, valores y ética moral, lo que la lleva a producir de manera honesta o corrupta.
En conclusión, se menciona en el libro: "Te dará los medios para la satisfacción de tus deseos, pero no te proveerá con deseos." (página 359) Esta frase concluye mi pensamiento acerca que Francisco plasmó claramente que el dinero no es producto de la maldad del hombre y mucho menos le vuelve un ser malvado. Más bien es la herramienta para el desarrollo y realización del hombre, dentro de los límites de un raciocinio adecuado y certero. Porque el hombre que triunfa al final es el hombre justo y con un mejor raciocinio de las distintas situaciones que se le presentan. Además el dinero no proveerá la satisfacción plena de un hombre, porque el dinero no es el fin último del ser humano. El dinero no compra la felicidad y mucho menos la dignidad y fin último del ser. El dinero es únicamente un bien material que permite al hombre superarse pero no de manera ética ni moral.
Bibliografía: